​El Cabildo fomenta la promoción de la gastronomía palmera en el sur de Tenerife

Foto; Momento de la presentación del proyecto 

Los productos de la isla de La Palma son los protagonistas de la experiencia gastronómica que ofrece el restaurante Cráter Identidad Canaria, ubicado en el hotel Royal Hideaway Corales Villas, en Adeje (Tenerife). La apertura del local, titulada La danza del Minué, está íntegramente dedicada a los productos y sabores de La Palma.

Esta acción se enmarca en el trabajo desarrollado por el Cabildo, a través de distintos departamentos para continuar posicionando y fomentando que se conozca la calidad de los productos palmeros en el exterior, en este caso, en un establecimiento hotelero de reconocido prestigio en el sur de Tenerife.

El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca, Soberanía Alimentaria y Bienestar Animal del Cabildo de La Palma, Alberto Paz, destaca que se trata de una experiencia inolvidable, “tanto por la calidad del menú como por la sensibilidad con la que se han tratado nuestros productos. Es emocionante ver cómo la identidad palmera se posiciona con tanta fuerza en la alta cocina canaria”.

Asimismo, destaca “la importancia de estas iniciativas que no solo enaltecen nuestra gastronomía, sino que generan oportunidades para nuestros productores y proyectan a La Palma como un referente gastronómico”.

El consejero resalta “el enorme trabajo de investigación, recuperación y reinterpretación que hay detrás de cada plato. El chef Eduardo Domínguez y su equipo han sabido rendir homenaje a nuestras tradiciones culinarias desde la excelencia y la innovación”.

Además, subraya que “la colaboración con el Centro de Agrodiversidad de La Palma ha sido clave para rescatar ingredientes únicos y ponerlos en valor a través de una propuesta de altísimo nivel”.

La degustación, de la mano del chef fuencalentero Eduardo Domínguez, permitió a las personas asistentes disfrutar de diez platos elaborados exclusivamente con ingredientes procedentes de la isla, como el queso de Los Tumbitos (Barlovento), la miel Tagoja, los ñames de Gallegos, tomates de Nogales, pan Zulay, sal de Fuencaliente, carne de cochino negro, pimienta palmera, y papas “marcialas”, entre otros. El maridaje incluyó vinos de las bodegas de Patricia Perdomo y el emblemático ron Aldea.

El menú La danza del Minué estará disponible durante los próximos dos años en el restaurante Cráter, que cuenta con una capacidad limitada de solo 20 comensales, lo que garantiza una experiencia íntima y cuidada al detalle. Cada pase fue acompañado de una explicación sobre el origen del producto, su modo de preparación y las historias que lo conectan con la cultura y el paisaje palmero.

La experiencia no solo se centró en los sabores; la cerámica utilizada fue obra de una artista palmera, los uniformes del personal evocaban la tradicional Bajada de la Virgen de las Nieves, y hasta los vinos seleccionados pertenecen a pequeñas bodegas de la isla, reflejo de una apuesta decidida por el kilómetro cero, la sostenibilidad y la identidad.

Desde el Cabildo de La Palma se sigue trabajando para reforzar la presencia de la gastronomía insular en el exterior vinculada a una experiencia única relacionada con la alta gastronomía y que aporta una experiencia singular a quienes la eligen y resaltan la profesionalidad el chef Eduardo Domínguez, que también es una muestra del talento palmero.