​La Palma Artesanía prosigue con su programa de formación y apoyo a los oficios tradicionales.

La Palma Artesanía, que gestiona la empresa pública Sodepal, sigue adelante con su programa de apoyo, formación y difusión de oficios tradicionales que tenía programada para el presente ejercicio 2020, adaptado a las exigencias marcadas por la crisis sanitaria de la pandemia del Covid-19.

En esta línea, se ha puesto en marcha en la Casa Rosada del Cabildo de La Palma un curso de formación para la confección de trajes tradicionales. Mientras que el Aula de Formación del Mercadillo de Villa de Mazo acoge el curso para la elaboración de polainas, gracias a la colaboración del Ayuntamiento de esta localidad.

Los cursos se celebran por la tarde, entre las 17:00 y 19:00 horas, todos los miércoles y jueves, hasta el próximo mes de diciembre. Debido a los protocolos sanitarios ante el Covid-19, cabe destacar que La Palma Artesanía ha buscado emplazamientos que permitan continuar atendiendo a la demanda. 

Mientras tanto, la Escuela Insular de Artesanía de Villa de Mazo amplía su oferta formativa con la próxima puesta en marcha de los cursos de cerámica y bordado, que arrancan el miércoles 28 de octubre, en horario de mañana, entre las 10:00 y las 13:00 horas.Estos cursos se prolongan hasta el próximo mes de diciembre, con una sesión semanal, cada miércoles, el de cerámica, mientras que el de bordado tendrá lugar los miércoles y viernes.

La consejera de Artesanía del Cabildo de La Palma, Susana Machín, ha destacado la importancia de promover la formación artesanal para que el conocimiento que se ha ido trasladando de generación en generación y que conforma un legado cultural y patrimonial de La Palma de valor incalculable no se pierda y continúe vivo en la Isla.

Raquel Díaz, consejera delegada de Sodepal y responsable insular de Promoción Económica, ha subrayado la demanda y buena acogida que están recibiendo las acciones formativas de La Palma Artesanía, lo que a su juicio pone de manifiesto la importancia del sector y la proyección que tienen los oficios tradicionales para un mercado que busca cada vez más productos exclusivos, de calidad y cargados de autenticidad como los que ofrecen la artesanía palmera.