El hallazgo ha sido posible gracias a los últimos datos proporcionados por el satélite Gaia, de la Agencia Espacial Europea (ESA). Los resultados de este estudio acaban de ser publicados en la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society (MNRAS).
La masa y el periodo orbital de este planeta sugieren una composición rocosa, así como un radio estimado de 1.4 radios terrestres, que podrá ser confirmado con futuras observaciones del satélite TESS”, explica Borja Toledo Padrón, autor principal del descubrimiento.