Angharad Morgan, nos habla de la última edición de los Oscars.

Mientras dure este confinamiento y todos nos conjuramos para poder salir adelante de este reto que tenemos por delante, vamos a hacer un repaso a lo que ha sido 2020, cinematográficamente hablando. Y por ello, un cita que tenemos todos los febreros en el Dolby Theatre de Los Ángeles: Los Oscars.

Si bien es cierto que voy a centrarme, principalmente, en los premios importantes, especialmente en los de mejor película, donde, por primera vez, una película de habla no inglesa, la surcoreana ‘Parásitos’ se alzó con el galardón.

¿Era merecido? Quiero dejar claro que aquí solo voy a verter una opinión estrictamente personal, tan respetable como cualquier otra y que, seguramente, los haters pongan el grito en el cielo. Pero para mí, no es merecido. No porque sea una mala película, que no lo es, al contrario es una película muy bien hecha. Aunque a mí no me terminó de enganchar, a pesar de tener momentos memorables y creo que no es lo mejor de la filmografía de Bong Joon-ho (pueden repasarla, son pocas películas y les recomendaría Mother, pero todas son disfrutables).

La verdad es que el premio es meritorio y sorprendente a partes iguales porque competía con grandes películas, aunque quizá sin ninguna favorita clara. Joker fue calificada muy pronto como una obra maestra y eso le perjudicó en la carrera. Para mí, la más floja de todas, aunque sus defectos son eclipsados por el excepcional trabajo de Joaquin Phoenix (que sí tuvo su estatuilla al mejor actor). ‘1917’ es un prodigio no solo técnico, sino estético y narrativo. Una gran historia, muy bien contada en ese falso plano-secuencia tan comentado ya, en la que el gran objetivo como es el de ganar una guerra queda en segundo plano frente a la fraternidad, la amistad y la libertad y responsabilidad individual en una misión ¿pequeña? (pueden ver también ‘Salvar al soldado Ryan’). ‘El Irlandés’ es otra obra magna, en todos los sentidos, de Scorsese. 

Gran película, que no se hace larga a pesar de la duración y cuya segunda mitad de metraje me parece magistral (aprovecho que hablo del gran Martin para recomendarles ‘Silencio’). ‘Érase una vez en... Hollywood’ es factoría Tarantino, para lo bueno y lo malo, una película sólida, apoyada en grandes interpretaciones, especialmente los DiCaprio y Pitt (este último se llevó su oscar a mejor actor de reparto), y que es una declaración de amor de Quentin a una época, al cine y a la televisión que tanto ama. 

‘Jojo Rabbit’, ‘Le Mans 66’, ‘Mujercitas’ e ‘Historia de un matrimonio’ me parecen que están un escalón por debajo, aunque son grandísimas películas que disfruté de principio a fin, especialmente el gusto con el que está hecha ‘Historia de un matrimonio’, película dura, violentamente contenida y, a su modo, optimista, con dos protagonistas (Driver y Johansson) fantásticos y una Laura Dern (con su oscar en casa por mejor actriz de reparto) que es una abogada profundamente odiosa. También me encantó ‘Jojo Rabbit’, una ¿comedia? descarada, políticamente incorrecta, trepidante y muy bien rodada que se llevó, merecidamente, el oscar al mejor guión adaptado.

El mérito de ‘Parásitos’ es doble porque además también se llevó el premio a la mejor dirección, compitiendo como monstruos como Scorsese, Tarantino o Mendes. Y aquí si que me parece tremendamente injusto el galardón, porque cualquiera de los tres que he nombrado se lo merecía, especialmente Sam Mendes, que merecía su segundo oscar (¿’no han visto aún American Beauty’? ¿O ‘Camino a la perdición’?) por una película técnicamente perfecta y que tiene en el filo de la butaca todo el metraje. Por supuesto el trabajo de Scorsese es excepcional (qué podemos decir de este genio) y el de Tarantino, que es un maestro del lenguaje cinematográfico, conoce las reglas y se las salta cuando y como quiere.

No quiero despedirme si mostrar el orgullo patrio por la nominaciones de Antonio Banderas a mejor actor, empresa que no pudo conquistar ante el enorme Joker de Joaquin Phoenix, ‘Dolor y Gloria’ a mejor película internacional, con la que Almodóvar volvía a la alfombra roja (aunque poco pudo hacer frente al ciclón ‘Parásitos’) y por la excelente ‘Klaus’ a mejor largometraje de animación que perdió ante ‘Toy Story 4’ (Ojo, la película de Pixar es muy buena, aunque no está a la altura de la trilogía, pero creo que la nuestra era mejor).

Como epílogo quiero recomendar la película de Rian Johnson, ‘Puñales por la espalda’. Para mí de lo mejor que he visto este año. Solo contó con una nominación a mejor guión original (que se llevó ‘Parásitos’), pero creo que es una grandísima película, muy bien dirigida, con un reparto coral fantástico (con ‘nuestra’ Ana de Armas a la cabeza) y que bebe de las novelas de Agatha Christie, enganchándote hasta el final.