​Cruz Roja en Canarias atiende a 149.265 personas vulnerables, a muy poco de alcanzar el objetivo de llegar a 150.000 personas a finalizar el año.

El Plan Cruz Roja RESPONDE frente a la COVID-19 era la mayor operación de la historia de Cruz Roja, en cuanto a movilización de recursos, capacidades y personas.Antes de cumplirse los dos meses, la Organización humanitaria superaba ampliamente los objetivos pero, ante el creciente impacto económico y social de esta crisis y el previsible incremento de las situaciones de precariedad, Cruz Roja ampliaba su llamamiento inicial con el Plan Cruz Roja Responde RECUPERACIÓN, cuyo fin era asistir a 2.400.000 personas, 150.000 en Canarias, hasta el próximo mes de diciembre.

Actualmente, Cruz Roja en Canarias ha atendido ya a 149.265 personas, cumpliendo prácticamente su objetivo previsto, pero, ante el aumento de las necesidades de la población, la Organización está adaptando su respuesta para asistir a todas las demandas que está teniendo: “la sociedad está solicitando más ayuda de lo que pensábamos y, por ello, nuestra respuesta será acorde al incremento de sus necesidades”, apunta Olga Díaz, subdirectora de Intervención Social de la Organización humanitaria.“Seguimos atendiendo a todas las personas que nos demandan ayuda y que, en muchos casos, no cubren las necesidades básicas de alimentación, y ahora estamos incrementando nuestra respuesta ante otras necesidades como el pago de suministros, alquileres o hipotecas”, destaca Olga Díaz.

El Plan de Cruz Roja frente a la COVID-19 es una respuesta integral que cubre ámbitos transversales que van desde la emergencia o el socorro, la atención sanitaria, la educación, la inclusión social, el apoyo psicosocial, el Medio Ambiente o la mejora del acceso al empleo, entre otras intervenciones.

En el ámbito de Socorros, Cruz Roja en Canarias ha prestado apoyo al Servicio de Urgencias Canario (SUC), poniendo a disposición 8 ambulancias para el transporte sanitario urgente, además de colaborar con el transporte de muestras para los análisis del Covid-19 y del personal sanitario para la realización de estas pruebas a domicilios. También ha facilitado el servicio de recogida de medicamentos en hospitales y entrega en los domicilios de los pacientes. Desplego 7 albergues para acoger a 269 personas sin hogar (3 en la provincia de Las Palmas y 4 en Tenerife), puso en marcha 2 infraestructuras hospitalarias temporales y ha realizado la toma de temperaturas a 445.058 personas en los puertos y aeropuertos de las islas.

En materia de Salud, la Organización ha realizado llamadas de seguimiento, información y acompañamiento a más de 90.000 personas usuarias de sus proyectos, principalmente a las personas mayores que viven solas y a 25.718 socios y socias mayores de 60 años, para hacer un seguimiento de su estado de salud y recordarles los consejos de prevención, además de detectar posibles necesidades.

En el campo de la Inclusión Social, se ha prestado atención a 24.430 personas y familias para la cobertura de sus necesidades básicas, mediante 48.107 entregas de ayudas en los domicilios, de alimentación, higiene personal y de hogar, prestaciones económicas y pago de suministros.

En el ámbito de la Educación, concretamente en el programa de Promoción del Éxito Escolar, se han realizado 2.906 entregas de ayudas de material escolar, tablets, juguetes y juegos, meriendas y material didáctico a niños y niñas para que puedan continuar su formación durante el confinamiento.

En el área de Empleo, Cruz Roja ha atendido a 4.035 personas que han perdido su empleo, intermediando con más de 200 empresas.La mejora del acceso al empleo es, precisamente, una de las prioridades en esta ‘segunda fase’ de la respuesta de Cruz Roja: “ahora se están incrementando las necesidades vinculadas con la pérdida de empleo, por lo que nos estamos volcando en acciones de información, orientación y capacitación, además de mantener las ayudas básicas como el reparto de alimentos”, insiste Olga Díaz.

Pero falta mucho por hacer, según apunta la portavoz de Cruz Roja: “la situación en la que han quedado las familias requiere de una atención y de un trabajo continuado en el tiempo; esto no tiene una respuesta en un día, ni en dos, sino que exige una intervención continuada y complementaria desde diferentes áreas”.

No obstante, la Organización humanitaria ve con cierto optimismo el futuro, según palabras de su presidente, Javier Senent: “debemos estar a la altura de un desafío sin precedentes, que deja aún más expuestas a millones de personas en situación vulnerable. Porque si existe Cruz Roja es para estar más cerca de ellas especialmente en un momento así. Y creo que lo estamos logrando, incluso por encima de los objetivos iniciales, con el Plan Cruz Roja RESPONDE”.